Los 13 días de paralización local generaron daños que ejecutivos del área aseguran costará mucho subsanar.
Una pérdida que bordea los 62 millones de dólares significó para el puerto de Iquique y parte de la Zofri la paralización del área que apoyaron los trabajadores locales y que amenaza con aumentar a medida que todas las áreas afectadas por el paro cuantifiquen sus daños.
El paro que se originó en puerto Angamos, Mejillones por la inclusión de la media hora de colación en la jornada diaria y que se extendió por 19 días, logró apoyo nacional, con una paralización de faenas de 13 días en Iquique.
Rodrigo Aguila, presidente del Consejo Local de la Cámara Marítima y Portuaria, comentó que “estimamos la cuantificación de las pérdidas producidas por el paro portuario ocurrido recientemente, tenemos pérdidas que bordean los dos millones de dólares diarios,
La inactividad nos generaría pérdidas para la cadena logística de la región alrededor de los 26 millones de dólares.
Alfredo Leiton, gerente general de la Empresa Portuaria Iquique, EPI, manifestó que “lamentablemente hay un perjuicio regional y económico tremendo”, agregando que “hoy las navieras podrían replanificar sus recaladas y dejar suspendido el puerto de Iquique a futuro, por lo que el conflicto podría generar daño a largo plazo”.
Asimismo Leiton detalló que “los usuarios que no recibieron los contenedores aquí y debieron descargar en Arica, tuvieron que pagar $500 mil por traer cada uno de ellos a Iquique”, acotó.
El gerente de la EPI aseguró que si bien esto genera una pérdida para las navieras, “la pérdida para la región es mucho mayor. Hubo pérdida de trabajo para los cargadores, estibadores, empresas dueñas de la carga y para los consumidores. La pérdida social es mucho más grande que 26 millones de dólares”.
ZOFRI
En tanto Felipe Illanes, presidente de la Asociación Usuarios Zofri A.G. aseveró que recién están en contacto con los socios, evaluando las pérdidas, pero afirmó que “hubo barcos que siguieron de largo, cargas repartidas. Para variar nos rebota, pues siempre somos los que pagamos los platos rotos. Durante la semana veremos dónde quedaron las cargas repartidas. Durante la semana veremos dónde quedaron las cargas repartidas. No es algo sencillo”.
Asimismo, Rodolfo Orrico, director de la Unión de Empresarios de la Zofri, comentó que hablaron con las navieras y enviaran una misiva pidiendo que reconsideren los costos, ya que tiene problemas para pagar el almacenaje. Orrico afirmó que entre sus socios, registran pérdidas que superan los 36 millones de dólares.
Lourdes Cárdenas, presidenta de la Asociación de Empresarios Zofri, afirmó que las pérdidas asociadas al paro “aún no son cuantificables en cuanto a los montos que los empresarios deberán o ya están desembolsando para recibir sus contenedores, pero se verán una vez que las cargas arriben a este puerto y los empresarios reciban sus facturas”.
A juicio de Cárdenas, lo que sí está claro es que “las pérdidas ocasionadas por cada paro no son dimensionables ya que deterioran la imagen de este puerto a nivel internacional y ocasionan que se catalogue como un puerto no seguro, lo que encarece los costos operacionales de los empresarios ya que los fletes aumentan sus rangos de precio”, sentenció.
ZOFRI: “Tiene un impacto lamentable en la región”
Para Álvaro Espinosa, gerente general de la zofri, las repercusiones son a nivel de bienestar en la población.
La paralización en el puerto de Iquique, lamentablemente impactó a una gran parte de la actividad económica de la región”, aseveró Espinosa.
El ejecutivo indicó que el éxito de muchas de las actividades económicas de la región requieren de una cadena logística eficiente y el puerto es una parte estratégica de esta cadena.
En el caso de Zona Franca, el ejecutivo aclaró que “cuando las cargas destinadas a zona franca no pueden ser ingresadas por el puerto de Iquique, se genera un impacto en el stock de las empresas usuarias del sistema o se incrementan los costos logísticos si las cargas son descargadas en puertos fuera de la región, generando ambos eventos daños a la actividad ya sea por pérdida de credibilidad al no poder cumplir los compromisos de abastecimiento con los clientes o pérdida de competitividad al incrementarse los costos”.
Espinosa agregó que “en una ciudad como Iquique, en que gran parte de su actividad económica depende del puerto, el daño provocado por estas paralizaciones portuarias atenta al bienestar de gran parte de la población”, aseguró Espinosa.
Fuente: Mundo Marítimo